Calidad de vida en pacientes ancianos con neoplasias hematológicas: Eligiendo tratamiento

La quimioterapia de los pacientes de edad avanzada con neoplasias hematológicas particularmente cuando se trata de leucemia aguda, en la actualidad sigue siendo un tema de debate, ya que el tratamiento intensivo conduce a resultados habitualmente poco satisfactorios en términos de remisión, supervivencia libre de enfermedad y supervivencia global.

La calidad de vida es uno de los intereses más importantes para los pacientes y el que toma mayor relevancia a la hora de decidir el tratamiento y su destino. La evaluación de la calidad de vida al diagnóstico puede proporcionar información útil sobre las necesidades, preferencias y el pronóstico de los enfermos ancianos.

Recientemente se ha informado sobre la importancia pronóstica de las escalas de calidad de vida, medidas al inicio de la enfermedad en algunas enfermedades oncológicas, sin embargo; su papel es menos conocido en el contexto hematológico, en particular, en pacientes de edad avanzada con leucemia aguda.

Cada vez resulta más claro que la calidad de vida podría tener un impacto pronóstico en pacientes de edad avanzada y neoplasias hematológicas, de hecho, estudios recientes han mostrado que la calidad de vida y el funcionamiento cognitivo son factores pronósticos estadísticamente significativos para la supervivencia.

No resulta inesperado encontrar estudios donde existe falta de correlación entre la evaluación médica de la función física por las puntuaciones del estado de rendimiento del ECOG y/o Karnofsky y por lo tanto, con frecuencia la terapia para estos pacientes que puede ser intensiva versus paliativa, está habitualmente condicionada al criterio médico y notablemente los pacientes puedan ser asignados erróneamente a un grupo de tratamiento sin una evaluación profunda de la calidad de vida y en consecuencia los resultados han mostrado una supervivencia más corta sin despreciar la intensa toxicidad a la que se enfrentan y que en ocasiones son la causa de defunción temprana.

La evaluación cuidadosa de la calidad de vida es particularmente útil en pacientes mayores de 70 años en los que la percepción del bienestar funcional pareciera ser un poderoso predictor de supervivencia. Según los resultados de algunos estudios el tratamiento adecuado para pacientes especialmente ancianos con buena calidad de vida puede ser el cuidado paliativo, ya que dichos pacientes pueden beneficiarse en términos de supervivencia y con mayor respeto a su calidad de vida.

Hay muchos enfermos con serias comorbilidades médicas, sociales y económicas, para quienes los enfoques intensivos no son factibles ni apropiados. Este tipo de situación clínica requiere conversaciones largas y reflexivas entre médicos experimentados,  pacientes y su entorno familiar, con la finalidad de encontrar el equilibrio entre la calidad de vida y el ritmo de progresión de la enfermedad aguda ya que en general, el instinto médico está orientado a tratar, con el objetivo de lograr la remisión y / o mejorar los recuentos sanguíneos, en lugar de buscar las razones por las cuales no se debe administrar el tratamiento que sin duda va en decremento de la poca calidad de vida que aun pueda conservar el pacientes.

Lo anterior obliga al grupo médico hematológico que con mayor frecuencia atiende a poblaciones de mayor edad y vulnerables a múltiples patologías a la reflexión y al entendimiento de agruparse colegiadamente con otras áreas para aprender de este universo de complejidades y poder elegir la mejor opción, aunque a veces signifique que lo mejor es no dar quimioterapia.

Dra. Martha Alvarado Ibarra

Jefa de Servicios de Hematología

Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, ISSSTE

Ciudad de México, México