El Dr. Eduardo Cárdenas, oncólogo médico adscrito al CMN “20 de Noviembre”, ISSSTE en la Ciudad de México, México, junto con la Dra. Ainara Soria, oncólogo médico adscrita al Hospital Ramón y Cajal en Madrid, España, nos hablan sobre el impacto que tiene el estudio CheckMate 141 a casi 5 años de ser publicado, extrapolando los beneficios demostrados en este a su práctica clínica diaria.
Los médicos comentan que el estudio ha impactado en lo siguiente:
- Estándar de tratamiento: Gracias a su beneficio demostrado en supervivencia global, brindó a la comunidad médica un nuevo estándar de tratamiento en segunda línea para los pacientes con cáncer de cabeza y cuello.
- Tratamiento altamente tolerable: A pesar de que los eventos adversos son diferentes a los ya conocidos con la quimioterapia, los médicos mencionan que son menores y que, poco a poco, han ido aprendiendo a manejarlos.
- Aumento en la calidad de vida: En los pacientes éste es un ámbito muy importante que, además de no verse comprometido, mejora.
- Opciones para pacientes de peor pronóstico: En el estudio se puede observar que existe un beneficio en supervivencia global independientemente del estado de los pacientes. También, en pacientes refractarios a un tratamiento radical, se observaron largos supervivientes si se ofrecía nivolumab después de la recaída.
- No requiere biomarcador: Lo consideran una ventaja para iniciar el tratamiento rápidamente ya que nivolumab fue positivo en todos los subgrupos, independientemente de la expresión de PD-L1. Se aclara que la sobreexpresión de este sí es un factor pronóstico predictivo.
Gracias al apoyo educativo de Bristol Myers Squibb México.
Cáncer de cabeza y cuellocheckmate 141Dr. Eduardo CárdenasDra. Ainara SoriaH&Nnivolumab